Proyecto Sillas Deportivas

“El deporte adaptado te da la oportunidad de disfrutar algo tan ínfimo, y a su vez tan glorioso como poder jugar al fútbol con tu papá”, dice Mauro Villar, futbolero de pura cepa y exponente del fútbol adaptado con silla de ruedas a motor.

En Argentina, jugar al fútbol debería ser un derecho, casi como educarse, comer y respirar. Unos años atrás, Mauro descubrió que, a pesar de la distrofia muscular que lo obliga a moverse por la vida en silla de ruedas, podía hacer goles y gambetear como cualquier otro.

Ahora, su sueño es que el deporte se masifique y que otros argentinos con diversas discapacidades puedan jugar en alguna canchita de la Asociación Argentina de Fútbol Sobre Silla de Ruedas a Motor (AAFSM). Pero hay un gran obstáculo: la silla adaptada para practicar el deporte cuesta cerca de 10 mil dólares y es inaccesible para la mayoría.

De esa necesidad surge un proyecto colaborativo que busca fabricar sillas de ruedas deportivas para los jugadores de la asociación, una idea que nació de una charla de pasillo en el Centro de Formación Profesional 404 Verbo Divino (en Rafael Calzada) entre Claudio Sánchez, instructor del curso de herrería y soldadura, y Raúl Villar, uno de sus alumnos y padre de Mauro.

Lo que parecía una utopía, de pronto puede volverse una realidad concreta. Al impulso primordial del CFP 404, donde ya se están realizando algunas partes de la silla, se sumaron el CFP 403 de Burzaco –a cargo de los planos para la matriz-, el Instituto Superior de Formación Técnica 232 de Burzaco y la Escuela Técnica n° 1 de Longchamps.

Todos ellos participarán de las sucesivas etapas de este proyecto colectivo, solidario e inclusivo, con el objetivo máximo de hacer una silla adaptada cien por ciento argentina, y homologarla para poder fabricarla en serie.

Colaborá con la asociación para que más chicos tengan acceso al deporte. Desde los CFP ponemos la mano de obra y el corazón.

Podés ayudar divulgando el proyecto y/o aportando a la cuenta de la AAFSM que figura en esta publicación (cuenta corriente Banco Ciudad, alias oso.sastre.collar). Además, son bienvenidos otros aportes como baterías de gel, ruedas, material e indumentaria deportiva, banner y calentadores de mano, etc.